Durante los últimos años, con el auge de los teléfonos inteligentes o "smartphones", han aparecido cientos de debates acerca de la privacidad que ofrecen este tipo de dispositivos.
Y es que, lo que muy poca gente sabe es que cuando adquiere un teléfono de estas características, permite que se guarde cierta información sin que el dispositivo llegue a preguntarte si desea guardarla. Es una de esas "opciones predeterminadas" que mucha gente sencillamente piensa que no existen.
Pues bien, la última alarma social de este tipo viene dada por la noticia de que los populares iphones guardan información sobre la posición de sus usuarios.
Mediante un sistema de triangulación a partir de la posición de las antenas telefónicas, el dispositivo averigua su posición (con un margen de error de varios kilómetros, todo sea dicho) y guarda esta información en un un archivo sin encriptar, al alcance de cualquier persona que pueda tener acceso al dispositivo.
Este hecho ha alarmado a la mayoría de los propietarios de un Iphone, que temen que alguien pueda utilizar esa información contra ellos.
Apple, como siempre, ha decidido no pronunciarse sobre este tema, dando rienda suelta a todo aquel que tenga acceso a algún medio de comunicación para que puedan especular sobre los maléficos planes que llevan a Apple a guardar esta información en estos dispositivos. El comienzo perfecto para otra gran conspiración.
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